Kevin Molina Villa, mi libro de sueños, antología poética, Marjorie Molina Cuero, compiladora
Joven despierto, inquieto por la vida. Muy activo, gustoso siempre de las artes y de lo desconocido. De la mano de su padre, amante en su niñez del teatro, títeres y mimos los que, quizás, dieron impulso a su tránsito por las letras.
Nació en Cali, el 21 de marzo de 1996. Hijo de Marta Ligia Villa Olave y de Albert Molina Cuero.
Fue enamorado de la lectura y de la escritura; de la música, la pintura y el cine.
Desde muy temprana edad empezó a escribir.
Se destacó en el deporte del judo. A sus once años representó a Colombia en Ecuador, obteniendo Medalla de Bronce.
Culminó su primaria en la Sede República de Francia de la I.E. Santa Cecilia, se graduó como bachiller del Colegio Miguel Camacho Perea de Cali; cursó dos semestres en el Programa de Extensión de la Escuela de Estudios Literarios de la Universidad del Valle.
Al momento de su fallecimiento, en junio de 2020, realizaba Taller de Técnica Vocal en el Instituto Popular de Cultura de Cali y adelantaba segundo semestre del programa de extensión en Música en la Universidad del Valle.
Su libro se publica como obra póstuma a partir de los manuscritos dejados por el autor.
Marjorie Molina Cuero, compiladora
La compiladora de esta obra, nació en la ciudad de Cali.
Es maestra normalista. Licenciada egresada de la Universidad del Valle.
Docente en instituciones públicas y privadas en el Valle del Cauca, vinculada a primaria y actualmente a Secundaria y Media en institución estatal.
Seguidora, cómplice y participe de las ideas de Kevin en su niñez, infancia y adolescencia, observando su inclinación hacia la lectura y escritura; testigo de su paso por diferentes expresiones del arte, la música, el teatro, la literatura; su gusto por el cine y su emoción visual al observar la pintura, la escultura y la arquitectura de los lugares por los que pasó.
Como tía, acompañó a Kevin desde muy niño. Le obsequió libros cuyos títulos él seleccionaba. Motivó la idea que siempre sería su sueño: publicar un libro con sus escritos.
Le acompañó y disfrutó con él acudiendo a museos a observar bellas obras; compartió, analizó y discutió en su compañía las temáticas, mensajes, escenografías de las películas que el cine arte brindaba.
LEYENDO EL LIBRO DE UN MUCHACHO: MI LIBRO DE SUEÑOS
Lizardo Carvajal
Los editores somos privilegiados: Con frecuencia nos llegan los versos más insospechados y navegadores del pensamiento humano. En junio llegó de este año de pandemia continuada, llegó a mis manos, estando despierto, Mi libro de sueños. Así tituló el joven Kevin Molina Villa su libro, que fue tejiendo a lo largo de su corta vida, antes de partir a los 24 años, en 2020.
Al conversar y saber que se trataba de un poemario recogido y compilado por su amorosa tía, la maestra Marjorie Molina Cuero, se me incendió el deseo de poder colocarlo en las manos de los lectores amantes de la poesía, por intermedio de su antolgista de cabecera.
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En mi condición de editor transité por los terrenos abundantes de metáforas, muy abundantes de Mi libro de sueños. Reconocí que es un sendero de buena poesía hecho por un muchacho con el que ahora se puede conversas: Kevin Molina Villa.
He saboreado su poesía. Creo que es lo importante: catar, beber, gustar los tejidos de los poemas, hechos artesanalmente.
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Así he podido saber que el hombre es un camello y yo soy como un lago. Así me lo enseña Kevin:
El hombre es como un camello
La mente es como un mono
El ego es como un perro que ladra
Pero yo soy un lago que habla.
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Reconocí la dialéctica de las cosas y esa verdad que permite saber que las liga una cuerda de guitara o de violín que suena y suena:
Detrás de cada cosa
Hay otra cosa más pequeña
Así que todo lo que toques
Tocará una cuerda
Que no parará de sonar nunca.
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Compartí con ese muchacho, que presiento que nos está mirando, como lector de los tiempos, la idea de la transformación de uno como persona:
La verdadera revolución
Debe ser un sentimiento que se lleva en el pecho
Que te cambie por dentro aunque
Aunque afuera nada cambie
Que no te deje contener el grito
Aunque todo este en silencio.
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Todo poeta va de la mano de ella…los saboreadores de la buena poesía seguimos el ejemplo de los poetas, somos obedientes. Así que:
Palma pequeña
Que abres y cierras una parábola
Indefinible entre el puño y la caricia.
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Dónde estás bella sonrisa
Ojos chispeantes
Mejillas de plata
Labios rozagantes
Te ha hecho el tiempo una cicatriz por cara
Un sentimiento de odio cicatrizó.
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Tu sombra es grata para mí
Tu pelo hace olas de luz
Surcos coloridos en negro diamante
Tu forma soldada a la ternura
Es fiera como el amor
Pareces una hoja que la noche
Ha hecho caer de algún árbol y nadie encontró
Te convertiste entonces en una pluma de cuervo
Que voló hasta mis zapatos y continúas ahí
Como un puma agazapado
Tu sombra me recuerda que eres un regalo de la noche.
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A Kevin tuve que hacerle la vieja pregunta que ya el antiguo Aristóteles había respondido: ¿Qué es la poesía? El muchacho me respondió:
La poesía es de las artes mi favorita
Como un pastel
Su cubierta blanca ingenua es
Y su relleno dulce.
Pensé, también en el título del libro. El muchacho así me dijo:
Soñé que era una estrella
Errando en el vacío nocturno
Y que la luna tan bella
Venía a rescatarme.